Sí, es una de sus mayores ventajas. A diferencia de los sistemas de láser tradicionales que pueden ser bastante dolorosos, Soprano Ice utiliza una tecnología de calentamiento gradual (SHR™) y un cabezal que enfría la piel (-3°C). La mayoría de nuestros clientes describen la sensación como un masaje con piedras calientes, una experiencia cómoda y prácticamente indolora.

El número de sesiones varía según la persona, el área a tratar, el color y el grosor del velo y el tipo de piel. Sin embargo, en promedio, se recomiendan entre 6 y 8 sesiones para lograr una reducción permanente de hasta el 90% del velo. Los resultados comienzan a ser visibles desde la primera sesión.

Soprano Ice es una de las tecnologías más versátiles del mercado. Es seguro y eficaz en prácticamente todos los tipos de piel, desde las más claras hasta las más oscuras, e incluso en pieles bronceadas. También funciona en una amplia gama de colores de vello, incluyendo los más finos y claros que otros láseres no pueden tratar.

La preparación es muy sencilla. Debes rasurar la zona a tratar 24 horas antes de tu cita (no utilices cera ni pinzas, ya que el folículo debe estar presente). Es importante que la piel esté limpia, sin cremas, aceites ni desodorantes. Además, evite la exposición solar intensa en la zona durante los 3 días previos a la sesión.

El tratamiento con Soprano Ice no requiere tiempo de recuperación, por lo que puedes retomar tus actividades diarias de inmediato. Recomendamos evitar la exposición directa al sol en la zona tratada durante los siguientes 3 a 5 días y utilizar siempre protector solar. También es aconsejable mantener la piel bien hidratada.